Chris Burden estudió artes visuales, física y arquitectura en la Universidad de Pomona, California. Su obra siempre transgresora y adelantada al momento es conocida por sus principios performáticos en los años 70 a los que le siguieron numerosos objetos, esculturas e instalaciones, formato con el que todavía trabaja.
Su último proyecto se titula
Metropolis II. Es una escultura cinética de grandes
dimensiones y muy compleja inspirada en el estilo de la ciudad
moderna, frenética, rápida. Así es como el artista se imagina las
ciudades dentro de 10 años, mega-edificios, loops de autopistas a
modo de montañas rusas plagadas de coches en las que el peatón ha
desaparecido. De acuerdo con el artista, "El ruido, el
continuo flujo de los trenes y el exceso de velocidad en los coches
de juguete, producen en el espectador la tensión de vivir en un
entorno dinámico, activo y bullicioso, típico de las ciudades del
siglo XXI.'' Burden evoca la energía de un modelo de ciudad del
futuro.
Esta ciudad en miniatura, en continuo
movimiento, consiste en 1.100 coches de juguete, 25 edificios, 18
vias de trafico rodado y 12 trenes y necesita un operador que la
maneje y además de otra persona que vaya recogiendo los coches que
salen volando impulsados por la inercia de ir circulando a
velocidades de 390 Kms/h. Burden tardó cuatro años en construirla,
con la ayuda del ingeniero Zak
Cook y su equipo,
en su estudio en situado en una colonia de artistas en
Topanga Canyon.
Nicolas Berggruen, un coleccionista
billonario, la ha comprado por ''millones de dolares'' y la ha donado a Los Angeles County Museum of Art
para que la exponga allí durante diez años. Yo sólo espero que dentro de 10 años
no vivamos en una ciudad así.
(Por Inés Caballero)